sábado, 29 de septiembre de 2012

Lola Mora (Parte II)

Obras


La Fuente Monumental Las Nereidas 
(también llamada de Lola Mora por haber sido realizada por la escultora argentina Dolores Mora de Hernández) es una obra realizada en mármol blanco de Carrara que actualmente se halla en la Costanera Sur de laCiudad de Buenos Aires. Representa a las nereidas asistiendo al nacimiento de la diosa Venus.
Su inauguración en 1903, en el Parque Colón, provocó en su época polémicas por estar representadas en ella figuras desnudas.
Cada uno ve en una obra de arte lo que de antemano está en su espíritu; el ángel o el demonio están siempre combatiendo en la mirada del hombre. Yo no he cruzado el océano con el objeto de ofender el pudor de mi pueblo(...). Lamento profundamente lo que está ocurriendo pero no advierto en estas expresiones de repudio -llamémosle de alguna manera- la voz pura y noble de este pueblo. Y esa es la que me interesaría oir; de él espero el postrer fallo.
Lola Mora
En 1997 fue declarada Bien de Interés Histórico Nacional.

Se trata de una de las obras más relevantes de la escultora Lola Mora (1867-1936), quien la realizó por encargo del intendente de la ciudad de Buenos Aires, Adolfo J. Bullrich. Éste pasó por alto la aprobación del Concejo Deliberante, lo que en su momento fue motivo de críticas.
La escultora, que se hallaba en un largo viaje de estudios en Roma, en agosto de 1900 regresó a su país con los bocetos de lo que sería la fuente, ofrecida en donación a la Municipalidad de Buenos Aires.
La fuente la realizó en Roma junto a talleristas profesionales y alumnos del taller. Primero armó un pequeño modelo en arcilla y luego construyó uno en su actual tamaño en yeso. Finalmente se realizaron los trozos de mármol, que fueron trasladados a Buenos Aires a mediados de 1902. Lola también viajó para supervisar el armado final. Para ello usaba pantalones que le facilitaban el movimiento sobre los andamios, lo que fue considerado por algunos como un agravio a la moral, por lo que hubo que rodear el lugar de trabajo con una cerca de maderas.
La fuente iba a ser emplazada en la Plaza de Mayo, donde actualmente se halla la Pirámide de Mayo, pero debido a que los desnudos de la obra ofendían a los miembros de la curia. Se sugirió el barrio de Mataderos (Buenos Aires), por ser muy despoblado, o el Parque de los Patricios. Finalmente privó el criterio de un grupo de prestigiosos ciudadanos, entre ellos Bartolomé Mitre, de instalarla en el Parque Colón. Allí se inauguró el 21 de mayo de 1903, en lo que era la intersección del Paseo de Julio(actual Avenida Leandro N. Alem) con la calle Cangallo (hoy Juan Domingo Perón), a poca distancia de la Casa Rosada. A la ceremonia no asistió ninguna mujer.
Las polémicas moralistas continuaron: la sociedad aún "victoriana" consideró "licenciosas" y "libidinosas" las esculturas que mostraban (y muestran) sin recatos los cuerpos desnudos emergiendo triunfalmente de las aguas.
...y en contraste al entusiasmo de la población que, en gran número, ovacionó a la escultora. Las fotos de la época la muestran única mujer en el palco, entre todos los funcionarios y terminado el acto, también sola entre el numeoso grupo de caballeros que la agasajó en el Club del Progreso...

Se llegó hasta a poner en duda que una mujer hubiese podido ser capaz de crear esa obra, diciendo que en realidad fueron sus ayudantes los autores.
La presión de las ligas moralistas obligaron a su traslado, en 1918, a un lugar más alejado. El sitio elegido fue la Costanera Sur, que en aquel momento se estaba urbanizando. Más precisamente, en la intersección de la actual Avenida Tristán Achával Rodríguez con la calle Padre Migone, frente a la entrada sur de la Reserva Ecológica de Buenos Aires, en el actual barrio de Puerto Madero. La propia Lola Mora se encargó de dirigir el traslado a ese lugar, que es donde se encuentra actualmente.
En 1971 se pensó en trasladarla a la intersección de la Avenida Santa Fe con la Avenida 9 de Julio, pero al observarse que la base tenía fisuras que hubieran podido agrandarse durante la mudanza se prefirió no moverla.
En 1997 el Poder Ejecutivo Nacional, por Decreto nº 437 del 16 de mayo la declaró Bien de Interés Histórico Nacional.

Carácteristicas

En la mitología griega, las nereidas eran las cincuenta hijas de Nereo y de Doris y se las consideraba las ninfas del mar, pues vivían en las profundidades del océano. Emergían a la superficie para ayudar a lo marineros que lo necesitaran, siendo los argonautas los más famosos.
El monumento, de filiación renacentista y formas y texturas de estilo barroco, representa el nacimiento de Venus. Se halla realizado en mármol blanco y su base representa una gran valva de molusco rodeada de tres grupos formados cada uno de ellos por un magnífico corcel sumergido en el agua de la valva. Cada animal es sostenido por la brida por un atlético varón desnudo (lamentablemente en un acto vandálico las bridas fueron rotas y reemplazadas por sogas). Estos varones son los tritones, servidores del cortejo de Poseidón. Sobre la valva se levanta un pilar de roca rústica (travertino de Tívoli) sobre la que se arrodillan dos nereidas desnudas (o sirenas) que sostienen una valva pequeña. Sobre ésta se encuentra sentada la Diosa Venus (quien se dice nació de la fecundación de la espuma de mar) representada por otro desnudo femenino. El espejo de agua de la fuente que rodea el conjunto refleja todo el motivo. 


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Las Nereidas
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Las Nereidas
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Las Nereidas

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Lola Mora Esculpiendo la Obra


sábado, 22 de septiembre de 2012

Lola Mora (Parte I)

Asi como la historia tucumana fue marcada por pintores, poetas, cantantes, payadores, tambien lo fue por escultores, quienes con el simple hecho de utilizar sus manos para crear algo tan artistico, inspirador, dandole otra dimension a los relatos e imagenes protagonistas de lo que fue tucuman, lo que es y en lo que se convertira, brindandole a todas aquellas personas que se interesan por saber los origenes de este lugar, sus costumbres, lo que simplemente le da esa esencia unica, una perspectiva mas amplia en todo aspecto dejando ver que la creatividad, la pasion por el arte y el alma libre de un artista tienen vuelo infinto a pesar de las criticas y desalientos que puedan recibir por sus obras...
Este es el caso de Lola Mora, una escultora tucumana que a pesar de ser criticada en algunas oportunidades por su arte supo darse a conocer y sobre todo enorgullecer al pueblo tucumano, demostrando que a pesar de que esta provincia no posea todo lo que las demas provincias poseen, sea una cuna de artistas invaluables para la historia argentina...


Trayectoria
Dolores Mora De la Vega nacio en Trancas, Provincia de Tucumán.Su padre era Romualdo Alejandro Mora, tucumano llegado a El Tala en 1857, donde contrajo matrimonio el 16 de marzo de 1859 con Regina Vega, una estanciera salteña nacida en El Tala. Lola Mora (Dolores Candelaria Mora Vega) era la tercera hija de siete hermanos: tres varones y cuatro mujeres. En 1870, a sus 4 años de edad, su familia decidió instalarse en la ciudad de San Miguel del Tucumán.
En agosto de 1874, a los siete años de edad, comenzó sus estudios en el exclusivo Colegio Sarmiento, colegio laico de Tucumán, obteniendo excelentes calificaciones en casi todas las asignaturas.

Inicios del arte
Desde los veinte años pudo estudiar bellas artes en la provincia de Tucumán con el pintor italiano Santiago Falcucci (1856-1922), quien comenzó a brindarle clases particulares.
Continúa sus estudios luego en Roma, Italia, país en donde tuvo como principal maestro a Giulio Monteverde.


Vida Privada
Cuando contaba con cuarenta años de edad contrajo matrimonio con un hombre veinte años menor que ella, Luis Hernández Otero, quien la abandonó cinco años más tarde. El acto civil se realizó el 22 de junio de 1909 y la ceremonia religiosa al día siguiente en la Basílica del Socorro. La madrina fue Rosario Clorinda G. de Avellaneda, esposa de Marco Avellaneda, a su vez hermano del expresidente Nicolás Avellaneda , y el padrino Manuel Otero Acevedo, único representante de la familia del novio. A los Otero no les agradaba la idea de ver a su hijo casado con una mujer que podría ser su madre. Tanto en el acta civil como en la religiosa, Lola Mora figura con una edad de treinta y dos años.
Un extendido rumor le atribuyó una relación amorosa con su amigo el expresidente Julio Argentino Roca. Otros rumores aseguraron que era bisexual y que se casó para restarles verosimilitud, lo que habría estado probado en cartas quemadas por su familia tras su muerte.1 Ambos rumores son negados taxativamente por sus familiares.

Fallecimiento y Reconocimientos
Tras tres largos días de inconsciencia, insensibilidad y dificultad en su respiración, murió en la Ciudad de Buenos Aires, el 7 de junio de 1936, rodeada de sus tres sobrinas que la asistieron durante la enfermedad.
Por esos días aparecieron extensas notas necrológicas en las principales publicaciones argentinas. Caras y Caretas, por ejemplo, comentaba:
"Siempre nos sorprende la tragedia del talento olvidado. Ahora más, al herir a una mujer, a la primera mujer argentina, cuya vocación supo afrontar las dificultades del mármol, los laboriosos primores del modelado de la arcilla."
Caras y Caretas
El vespertino Crítica señalaba responsables del abandono en que se encontraba la Artista Universal:
"...Es el homenaje perenne y sincero que compensa, hasta cierto punto, la ingratitud material de los poderes públicos y la sorda hostilidad de nuestros círculos artísticos que veían en Lola Mora la expresión de gustos anticuados y definitivamente 'pasados de moda.'"
Diario Crítica
Por su parte, el Diario La Nación que tantos favores concediera a Lola Mora en sus años de esplendor, decía sobre ella:
"El decidirse por el arte, ya había significado una proeza, recordemos la fecha de sus comienzos y su actuación inicial. Mujer y escultora parecían términos excluyentes. Los prejuicios cedieron, sobrepujados por la evidencia de su obra."
Diario La Nación
Es muy destacable que en todas las necrológicas que se publicaron en estos y otros medios, sólo se recuerda de su vasta obra la Fuente de las Nereidas.
En su memoria, el Congreso de la Nación Argentina instituyó por ley 25.003/98, la fecha de su natalicio –17 de noviembre–, como “Día Nacional del Escultor y las Artes Plásticas”.
Por su parte, la Comisión Interprovincial de Homenaje Permanente a Lola Mora, el 17 de noviembre de 1996, descubrió la Piedra Basal del “Monumento a Lola Mora”, que se erigirá frente a los Jardines que llevan su nombre, en el Parque San Martín de la Ciudad de Salta. A la vez que desde 1995, viene organizando año tras año la “Semana de las Artes”, que se celebra en simultáneo en El Tala y la Ciudad de Salta (del 17 al 23 de noviembre) con participación de todas las disciplinas artísticas y las Regiones del país bajo la denominación de Festival Nacional de las Artes “Lola Mora” (o Lola Mora Festival)

Imágenes

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sábado, 15 de septiembre de 2012

La Casa Historica de Tucumán (Parte II)


El salón y mobiliario

Hemos llegado al lugar más importante de este Museo: El Salón de la Jura. Las sesiones del 9 de Julio de 1816 que decidieron la independencia de estas tierras, se desarrollaron en este venerable salón, el cual se mantiene tal cual estaba en aquél tiempo. Se tiene pocos datos sobre el salón durante las sesiones, pero sabemos que la mesa de la presidencia fué facilitada por la familia Áraoz, y es la misma que se encuentra exhibida en el museo. Las sillas se suponen prestadas, pero documentaciones posteriores demostraron que en su mayoría pertenecían al Estado. Según testimonios de contempo-ráneos, "se trataba de sillas talladas, pata de cabra, con asientos de suela grabada a cincel (...) y fijada a la madera con tachuelas de bronce.(...)". 
Iluminaba el salón una araña de 8 velas (...). En el techo las vigas estaban a la vista, y unas cañas huecas hacían de intermediarias con la teja." 
Los gruesos muros revocados con barro estaban blanqueados a la cal. Sobre la mesa de la presidencia reposaba un tintero de plata. Acaso, en las paredes, algún retrato de tema religioso ó un pequeño espejo. Y nada más. Como mencionara el historiador Carlos Páez de la Torre, "Había en el ambiente una modestia y una sencillez que hace aún más tocante, si cabe, la declaración de la Independencia ". 


Curiosidades Acerca de La Casa de Tucumán


  • En la época de la Declaración de la Independencia, la calle en donde se encontraba la casa se denominaba "Calle del Rey". Desde el mismo día de la poclama-ción comenzó a llamarse "Del Congreso" ó calle "Congreso de Tucumán", nombre que mantiene hasta hoy. 
  •  Para que los congresales tuvieran más espacio se demolió una pared de la sala de la jura, llegando a medir 15,40 por 5,40 metros. Veintinueve fueron los congresales en la jura. Casi 10 meses sesionó el congreso en la vieja casona, desde el 24 de marzo de 1816 hasta el 17 de enero de 1817, año en que se trasladó a Buenos Aires. 


  •  El General Manuel Belgrano se encontraba presente ese día en la Casa, pero en principio no pudo deliberar por no ser Diputado. 

  •  Luego de proclamar la Independencia de Los reyes de España y su Metropoli, a moción del Diputado Medrano se agregó en el Acta: "Y de toda otra dominación extranjera". 

  •  Las noticias sobre el Congreso llegaron a Buenos Aires 10 días después, el 19 de Julio. El General San Martín recibió la noticia de la declaración de la Independencia estando en Córdoba, el 22 de Julio. 


  •  De todos los objetos históricos que hay en el museo el que mayor certificación de autenticidad posee es el clavo del que pendía el dosel donde se hallaba el acta de la jura. 


  • La tradición y algunos autores sostuvieron durante mucho tiempo que la Casa había sido "prestada incondicionalmente" por su dueña, Francisca Bazán de Laguna, para que sesionara en ella el Congreso de 1816. También se decía que los muebles y otros enseres necesarios para las deliberaciones habían sido cedidos por las familias notables de la sociedad tucumana. En 1972, el historiador Ramón Leoni Pinto demostró en un artículo que tuvo poca difusión pero gran impacto historiográfico que ambas cosas no eran ciertas. Leoni Pinto, probó con documentos del Archivo Histórico de Tucumán que en 1815 " el Estado provincial refaccionó y alquiló la Casa para que funcionaran en ella la Caja, la Aduana principal y sus Almacenes". El alquiler costaba 25 pesos por mes. 


  • En lo que respecta a los muebles, supuestamente prestados, el historiador citaba un asiento contable de Hacienda de mayo de 1816 sobre el pago de "160 pesos por cuatro docenas de sillas que se mandó trabajar para la Sala de Sesiones". Y comentaba Leoni Pinto: "Lo cual implica que las sillas utilizadas en 1816 eran del Estado. Excepto, tal vez, la del presidente y las de los secretarios".


  • El libro de actas original, donde se firmó la Declaración de la Independencia, se perdió en 1820 en la Legislatura de Buenos Aires; hoy se conserva una copia de dicho documento realizada a fines de julio de 1816.
  •  Sólo visitaron oficialmente la Casa de la Independencia seis presidentes democráticos en ejercicio: Nicolás Avellaneda, Juan Domingo Perón, Carlos Saúl Menem, Fernando De la Rúa, Néstor Kirchner y Cristina Fernández. Otros, como Raúl Alfonsín, lo hicieron, pero no durante su mandato. 


  • Como dato interesante es importante destacar que Hawai fue el primer país que reconoció la Independencia de Argentina en 1818; Portugal en 1821; EEUU en 1822; Inglaterra en 1823 y España recién en 1863.















sábado, 8 de septiembre de 2012

La Casa Historica de Tucumán (Parte I)



Las visitas al museo de La Casa Historica o como es llamada por muchos ''La Casita de Tucumán'', tienen algo especial, no por el simple hecho de que se trate  de uno de los escenarios mas importantes para la historia Argentina, sino que, porque luego de abarcar tantos hechos que de alguna manera u otra marcaron nuestra identidad como argentinos, el ambiente de estas salas y patios esta colmada de un aire diferente, un aire de independencia, de libertad o tal vez solo de orgullo y felicidad por todo lo que nuestros antecesores lograron gracias a sus inalcanzables luchas, colmada de sonidos que se nos revelan paz y a la vez intriga por descubrir cada detalle de aquellos dias tan distintos a los de hoy, sonidos que plasman la calma y serenidad que solo se obtiene luego de alcanzar las metas, los anhelos, aquel objetivo claro que estuvo en el corazon de cada argentino en cada grito, suspiro, y lagrima derramada durante interminables batallas...Es asi como para muchos se aprecia este lugar anque para muchos solo sea un lugar turistico, para muchos de nosotros es Nuestro Lugar, Nuestra Identidad, Nuestro Orgullo...

La Casa Histórica de la Independencia  fue sede del congreso que se reunió el 9 de julio de 1816 para declarar que la Argentina iniciaría su camino como nación. Hoy funciona como museo; está a apenas una cuadra de la Catedral, sobre la calle Congreso, que fue peatonalizada en ese tramo para conservar mejor este Monumento Histórico Nacional.



La ciudad de S.M de Tucumán no siempre estuvo en su presente suelo. Antes estaba en Ibatín (40 Km. más al sur) y desde allí fue trasladada, en 1685, a su territorio actual.
Hacia fines del siglo XVIII, una de las primeras viviendas que se levantó en el nuevo lugar fue la que hoy conocemos como "Casa de Tucumán". En aquél entonces, esta vivienda era, según el arquitecto Mario J. Buschiazzo, "una típica casona colonial de 35 varas de frente por media manzana de fondo (30 metros), con patio principal; segundo patio y huerta. Dos amplios locales, presumiblemente de comercio, y otro más pequeño de portería, ocupaban el frente. El primer patio estaba encuadrado por las habitaciones privadas, con galería solamente en el costado opuesto a la entrada, precisamente donde luego se efectuarían las reuniones. Esa ala con galería separaba el patio principal del segundo patio y estaba constituida por cuatro locales, uno de ellos más grandes que los restantes, probablemente el comedor. En el segundo patio sólo había dos habitaciones, probablemente de servicio, y un pozo de brocal.
Contigua al comedor había otra habitación más pequeña, que oficialmente servía de comedor. Separados ambos locales por un simple tabique, que fue demolido para dar mayor amplitud a la que iba a ser la sala de deliberaciones, que alcanzó a tener 15,40 mts. por 5,40.

Debido a su pésimo estado de conservación, la casa fue casi completamente demolida en 1903 salvaguardándose el Salón de la Jura de la Independencia el cual quedó cubierto por un templete de hierro y vidrio estilo Art Nouveau. 
En 1941 se la reconstruyó totalmente al detalle (incluso usando los mismos tipos de ladrillos, tejas y baldosas) basándose en fotografías y documentos existentes. La dirección de la obra de reconstrucción estuvo a cargo del arquitecto Mario J. Buzchiazzo. Ese mismo año fue declarada Monumento Histórico Nacional.
Uno de los pocos añadidos que se hicieron fue el coolocar esculturas alusivas a la Declaración de independencia de la Argentina en el patio posterior, realizadas por Lola Mora. 
Actualmente esta casa funciona como museo y es centro tradicional de los festejos por la independencia. 



El Museo 

La Casa cuenta con 9 salas en su Museo, éstas exhiben gran cantidad de elementos de la época colonial como ser armas, documentos, muebles, objetos de la Independencia Nacional, platería criolla. Hemos disfrutado mucho visitando las salas, son inquietantes las pinturas que allí se exhiben y los elementos recuperados de la casa en el momento de su demolición (hay ladrillos originales, llaves, clavos y elementos de utilidad doméstica). Por supuesto, emociona el imponente candil, que estuvo presente en la mesa al firmarse el acta de la Independencia.El Museo también cuenta con un laboratorio de restauración donde se realizan trabajos de recuperación del patrimonio, sobre todo pictórico. 



Los patios y jardines 


Apenas cruzado el acceso a la casa se encuentra el primer patio, en el cual se aprecian las puertas y ventanas de los antiguos aposentos (hoy salas , biblioteca y oficinas), y hacia el final las ventanas y puerta del Salón de la Jura. 
En el segundo patio, llamado "del Aljibe", numerosos árboles de la región : Lapacho, Ceibo, Algarrobo, Estrella Federal, naranjos y otros árboles frutales. 
El tercer patio, también con jardines y galerías, está destinado a las placas de homenajes, centenarias la mayoría. En el último sector del tercer patio, se encuentra el mástil con la bandera y hacia los costados los famosos sobrerre]lives de Lola Mora. 


























domingo, 2 de septiembre de 2012

Antonio Osorio Luque


Como ya se sabe, la historia de Tucumán fue marcada por los pasos de muchas personas, algunas se dieron a conocer mas que otras, pero nunca restandole importancia a las demas, que de diferentes formas supieron dar lugar a suceso importantes. En este caso esta persona influyo de manera positiva a la sociedad, enriqueciendo la cultura, dando paso a que las demas personas se expresen a traves del arte, demostrando la cantidad de artistas que puede llegar a tener un a sociedad, pero lo mas importante que aporto este artista fue embellecer y dar color a los retratos monocromaticos propios de la historia...Hablamos de Antonio Osorio Luque, un gran pintor tucumano, pero sobre todo un ejemplo de como guiarnos y alcanzar lo que nos apasiona...
Fue un notable paisajista de la década del 50, y gran parte de su temática se concentró a pintar escenas de la vida de la zafra. Algunas de sus obras se encuentran en el Museo Provincial Timoteo Navarro y en la Casa de Gobierno, entre otras instituciones.  Junto a Demetrio Iramain, fueron considerados los pintores del período impresionista del paisaje norteño.
"El paisaje es el género que ha dado a Tucumán sus plásticos más destacados y que, inexplicablemente, es subestimado y casi ignorado por los artistas de las últimas generaciones".  La reflexión es de Alfredo Pecastaing-Guerineau, titular de la Dirección de Artes Plásticas de la Provincia, organismo dependiente de la Secretaría de Cultura.  "El paisaje como género nos da la identidad y el espíritu de una región determinada... nos habla de sus habitantes con sus mitos, creencias y supersticiones, padeceres, enfermedades y pobrezas. Es el vivo testimonio crítico de una realidad sin tiempo. Es el ayer, el hoy y es el mañana", afirma Pecastain y agrega, "un día Lobo de la Vega, haciendo gala de una fina ironía, me comentó: ‘(En Tucumán) todos son grandes pintores; en cambio nosotros, sólo paisajistas’"

“El amaba mucho esta provincia; y, a pesar de que se había radicado en Buenos Aires, siempre regresaba y recorría el campo donde escribía apuntes y efectuaba bosquejos de sus futuros cuadros”, afirma Gladys Osorio Luque, su hija.

Osorio Luque falleció el 12 de mayo de 1979,  y su último deseo fué que sus cenizas sean enterradas cerca del Cristo Redentor, en San Javier, por lo que muchos años después, el 19 de Noviembre de 2010, en la Casa de la Cultura municipal ubicada en el Parque 9 de Julio, la Dirección de Cultura de San Miguel de Tucumán rindió un homenaje al reconocido pintor y paisajista tucumano, Antonio Osorio Luque y durante la ceremonia, el titular de Cultura, Alejandro Soto, recibió en custodia, las cenizas del artista hasta que se establezca el lugar donde descansarán definitivamente.


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