domingo, 25 de noviembre de 2012

Palito Ortega 9Parte II)

Ingreso al Club del Clan y consagración

A fines de 1962 fue integrado al Club del Clan, transmitido por Canal 13, en donde su canción más popular fue «Despeinada», de Chico Novarro. Por su parte, Ortega introducía a su repertorio temas como «Bienvenido amor», «Media novia», «La felicidad» y «Camelia».
Para 1963 los integrantes del grupo más populares eran Palito Ortega y Violeta Rivas, quienes recibían importantes sumas de dinero. Luego, ellos junto a Johnny Tedesco, Chico Novarro, Lalo Fransen y Nicky Jones se trasladaron a Canal 9, dirigido por Alejandro Romay, para encabezar el ciclo Sábados continuados con la conducción de Antonio Carrizo.1
El programa transmitido en varios países de América Latina llegó a alcanzar 55,3 puntos de audiencia en 1963; por su parte, Canal 7 impuso otro ciclo similar titulado Ídolos de la juventud. En esta década, Palito Ortega figuró en múltiples revistas de interés general y mantuvo un romance con la actriz Marta González a lo largo de 1964. El 12 de marzo de aquel año se estrenó El Club del Clan, película dirigida por Enrique Carreras con la participación de Alfredo Barbieri y Beatríz Bonnet.
Tras presentarse en el club Bohemios de la Boca, en 1964 realizó su primera gira internacional a México, donde grabó un long play; luego viajó a Estados Unidos, donde conoció a Paul Anka; y finalmente, hizo giras por París, Madrid, Londres y Montevideo. El grupo se disolvió definitivamente en 1965, cuando ya era muy aceptada la banda inglesa Los Beatles.
Después, les dedicó a sus seguidores un libro de poemas llamado Simplemente extraño y se relacionó laboralmente con María Elena Walsh con el fin de componer temas infantiles y recopilarlos en un disco simple, el cual fue presentado en 1965 con melodías como «Canción del Jacarandá». En 1966 protagonizó la obra teatral La extraña pareja, de Neil Simon y estrenada en el Teatro Astral con Rodolfo Bebán.
De sus otros discos se destacan: «Estar enamorado», «Sabor a nada», «Dicí por qué no querés», «Sin timón», «Todo es amor», «El changuito cañero», «Vestida de novia», «Me permite», «Papeles», «Qué lindo», «Calor», «Mi tierra», entre otros. Sobre el éxito que tenía Ortega en aquellos años, Ricardo Mejía expresó: «Palito no trataba de imitar a nadie, su rock era original y nacional, yo creo que su gran éxito fue justamente que era original y como yo no era argentino pude verlo con mayor claridad y objetividad.»

Actuaciones cinematográficas

Los primeros filmes encabezados por Ortega se estrenaron paralelamente a la edición de sus discos. Inicialmente estas producciones fueron realizadas como una prolongación de su éxito musical, es decir, un método de llevar al cine sus más relevantes temas musicales
A pesar de que ya había trabajado como extra en 1958, su siguiente participación cinematográfica en el cine fue en 1963 cuando, contratado por Enrique Carreras, filmó Un viaje al más allá, donde interpretó «Despeinada». En 1964 fue el protagonista de El Club del Clan, donde la trama indicaba que él junto a otros compañeros y un productor teatral deseaban destacarse en el espectáculo presentándose con su compañía en diversos sitios.
Basada en una novela de Alfonso Paso, en 1965 co protagonizó junto a Violeta Rivas Fiebre de primavera interpretando a un estudiante. Continuamente realizaba recitales, discos, obras teatrales y presentaciones en televisión. En 1966 rodó la película Mi primera novia, una adaptación de la película Adolescencia (1942), con Ángel Magaña yMirtha Legrand. Durante la grabación, conoció a la joven actriz Evangelina Salazar, que se había destacado en televisión con Jacinta Pichimahuida. Al momento de su estreno la relación entre ambos ya estaba consolidada. En 1966 ganó el Festival de la Canción en Piriápolis, con el tema «Convivir» y logró más de 50 premios internacionales, incluyendo el de compositor en el Midem de Cannes de 1968.
En febrero de 1967 hizo una gira por todo el país y a su regreso rodó una serie de películas como Un muchacho como yo (1968), donde encarnó a Raúl Sierra; Corazón contento (1969) en la que interpreta el tema del mismo nombre; ¡Viva la vida! (1969), con Mercedes Carreras; Los muchachos de mi barrio (1970), con guiones de Norberto Aroldi; La familia hippie (1971), con cuadros musicales; entre otras. En Londres filmó ¿Quiere casarse conmigo?, con la española Sonia Bruno, y en España rodó Amor en el aire, dirigida por Luis César Amadori.
En 1972 actuó junto a Libertad Lamarque (quien no trabajaba en el cine argentino desde 1947) en La sonrisa de mamá, filme del cual ambos compaginaron un tema con el mismo nombre y el cual es muy evocado en "El día de la madre". También formaron parte del elenco Nelly Beltrán, Irma Córdoba, Adriana Aguirre y Jacques Arndt.
Muchas de sus producciones cinematográficas llevaban el nombre de sus canciones, tal es así ¡Viva la vida! o Un muchacho como yo. Luego de estrenar varias comedias entre 1973 y 1975, al año siguiente debutó como director con la película Dos locos en el aire, con Carlitos Balá (quien trabajó en siete filmes de Palito). Bajo el auspicio de Chango Film Producciones, el argumento relataba las aventuras de un oficial de la Aeronáutica (Balá), que siempre provocaba conflictos, y éstos eran apañados por su instructor de vuelo (Ortega) que los tolera debido a la amistad de muchos años que ambos tienen.
El periodista Jorge Mercanti entrevistando a Palito Ortega en Misiones. A fines de la década de 1970, ya instaurada la dictadura militar, hizo otras dos películas de relevante éxito: Brigada en acción, con Juan Carlos Altavista y Blanca del Prado; y El tío Disparate, con Iris Láinez y Las Trillizas de Oro. En 1979 convocó a Luis Sandrini para que participara en una película suya con Evangelina Salazar, Jorge Mayorano y Alicia Zanca: Vivir con alegría, propuesta que el legendario actor aceptó a pesar de sus serios problemas para movilizarse debido a una hemiplejía que había padecido en 1978. El éxito de la película motivó a que se produjese otra, la cual se tituló La familia está de fiesta, que incluía en el elenco a Niní Marshall. El último día de filmación, tras tomarse algunas fotografías, Sandrini sufrió un colapso vascular y se desmayó repentinamente, por lo que debió ser internado y falleció dos semanas después a los 75 años. El deceso del actor fue el motivo por el cual se cambió el título de la película a ¡Qué linda es mi familia! y se dedicó ésta a su memoria. El propio Ortega expresó: «Decidí cambiarle el nombre porque consideré que ya "la familia no está de fiesta". Me pareció algo lógico y así lo hice.»
En total fueron siete los filmes en los que incursionó como director y nueve las que hizo como productor. Ya en uno de sus últimos proyectos, Cosa de locos (1981), le encargó la dirección a Enrique Dawi.

sábado, 10 de noviembre de 2012

Palito Ortega

Otra de las personas oriundas de Tucumán reconocidas a nivel internacion, es Palito Ortega quien se destaco por llegar a conseguir el aprecio y respeto de la gente a traves de su musica, a nivel politico y ademas como persona...


Palito Ortega nacio un 8 de marzo de 1942, su nombre Palito es el seudónimo de Ramón Bautista Ortega, actor, cantante, político, productor y director de cine argentino.
Nacido en un hogar humilde, desde su juventud desempeñó diversas labores para colaborar con su numerosa familia. Desde la década de 1960 integró el grupo musical El Club del Clan, que tuvo una relevante repercusión y se mantuvo durante varios años.
En su trayectoria de más de cinco décadas, ha filmado 33 películas, de las cuales se destacan: "Los muchachos de mi barrio (1970), Mi primera novia (1966), La sonrisa de mamá (1972), El tío Disparate (1978) y ¡Que linda es mi familia! (1980), entre otras. Como cantante, se lució con sus interpretaciones de «La felicidad» y «Despeinada».
Entre 1991 y 1995 se desempeñó como Gobernador de Tucumán y entre 1998 y 2000 fue Senador por la misma provincia. En la actualidad, continúa presentándose por diversos escenarios brindando conciertos.


Infancia y Juventud

Ramón Bautista Ortega, tal su verdadero nombre, nació en el ingenio Mercedes, de la ciudad de Lules, en la provincia de Tucumán, el 28 de febrero de 1942. Sin embargo, su fecha de nacimiento fue registrada por sus padres recién el 8 de marzo del mismo año, por lo que es común que figure como su día natal.
Hijo del obrero azucarero Juan Ortega y de Tomasa Rosario Saavedra, fue el segundo de siete hermanos (cinco varones y dos mujeres). Ramón comenzó a trabajar a los cinco años como lustrador de zapatos para ganar dinero y ayudar a su numerosa familia.
Luego debió abandonar sus estudios primarios, pero finalmente retornó a ellos con una maestra que les ofrecía clases durante las noches. En 1954, cuando contaba con 13 años, sus padres se separaron y su madre abandonó a la familia, quedando los hijos a cargo de su padre. Durante toda su niñez realizó múltiples trabajos como reparador de bicicletas y vendedor de periódicos, cubanitos (masas típicas de Argentina rellenas con dulce de leche) y cotorras.


Traslado a Buenos Aires y primeros trabajos

En 1956, con tan solo 14 años, decidió trasladarse a la ciudad de Buenos Aires junto a un amigo para buscar trabajo. A pesar de que en su primer día residió en Plaza Retiro, después llevó a cabo diversas funciones como ser camarero, cadete, limpiador y vendedor de café. Ofreció sus primeras actuaciones como imitador del popular cantante Elvis Presley durante un festival en la Sociedad de Fomento "Jacarandá" de Berazategui.
Finalmente, mientras se desempeñaba como vendedor de café, ingresó con este mismo trabajo a Canal 7 y Radio Belgrano hasta que Juan Carlos Ginés lo convocó para ser su ayudante. En 1957, en la ya mencionada emisora, conoció a Dino Ramos y Silvio Soldán (que participaban en la orquesta de Carlinhos), a quienes acompañó durante tres años en esta banda. En ese lapso de tiempo aprendió a ejecutar la batería y la guitarra con el músico Tito Cava.
También colaboró en la composición de las canciones de Ramos, y en una de las giras de Carlinhos llegó a la provincia de Mendoza, donde actuó en un club nocturno. Con el seudónimo de Nery Nelson interpretó temas folclóricos en Radio Cuyo por tres meses. Posteriormente grabó dos discos con el sello Azteca, con temas como «La edad del amor», «No te enojes nena», «Mira el arco iris» y «Cupido».
Tras modificar su nombre artístico por el de Tony Varano, trató de formar un grupo musical, viajó a Chile integrando un circo y reemplazó a un vocalista del grupo musical The Lyons, en donde no tuvo demasiado éxito ya que no sabía el idioma inglés y se le dificultaba interpretar las canciones.
Luego de ser rechazado por la compañía discográfica Odeón, se dirigió a la grabadora Discofonía, donde grabó un disco simple con dos canciones: «Ya no quiero» y «La locura».


Su labor en la RCA Victor y su debut televisivo

En 1962 se presentó en la empresa RCA Víctor y cantó el tema «Sacate la careta» (compuesto por él) ante el directivo Ricardo Mejía, quien lo convocó como compositor. Esta canción fue interpretada por Johnny Tedesco pero poco después, tras entonar veinte temas musicales junto a Víctor Buchino, Ortega hizo un disco simple que contenía tonadas como «María» y «Escalofrío».
El propio Mejía, a quien no le agradaba el apelativo Nery Nelson, lo renombró a Palito Ortega por su contextura delgada. Luego, le presentó al periodista Leo Vanés, quien fue su agente de prensa en sus comienzos con el objetivo de orientar su carrera artística. Con la orquesta de Oscar Toscano, en mayo de 1962 grabó otro disco en donde presentó «Burlado» y «Dejala, dejala», con la colaboración de Dino Ramos.
Tras debutar en televisión en La cantina de la guardia nueva, por Canal 11 a principios de la década de 1960, su hermana Rosario murió atropellada por un automóvil a los 11 años. El hecho deprimió mucho a Ortega, por lo que sus presentaciones con temas alegres contradecían su imagen sobria. Desde aquel entonces, se le atribuyó el apelativo El chico triste de las canciones alegres.


Imágenes

File:Lules Tucuman.JPG







sábado, 3 de noviembre de 2012

Ruinas de San José de Lules

El turista que visite las Ruinas de San José de Lules, a sólo 23 kilómetros de San Miguel, podrá conocer la escuela, los dormitorios y el almacén de los indios Lules, el convento de los Jesuitas, una capilla y decenas de objetos de un valor incalculable que hacen a nuestra cultura y raíces.

La estancia de San José de los montes de Lules, comenzó a formarse a fines del siglo XVII por una donación que hizo la Compañía de Jesús, D. Jornada de Trejo.

Fue incrementada por una donación de tierras del Deán Francisco de Salcedo,
Hacia fines del s XVIII. Aquí funciono una granja que contaba con una iglesia, el claustro y varias casas. Había también un molino, un horno para ladrillos, talleres de carpintería y herrería, fabrica de sombreros, además de un pequeño cañaveral. 
Llama la atención un pileton en el patio, el cual era usado para curar el cuero y con ello hacer sandalias y, se encuentran las ruinas de los dormitorios, almacenes y talleres donde enseñaban diferentes cosas a los indios lules.
Se puede visitar en la iglesia un museo donde se exponen documentos, elementos utilizados por los jesuitas, vasijas, planos, entre otros.
Los Jesuitas fundaron la primera escuela, cultivaron por primera vez la caña de azúcar, convirtiendo a la provincia en la cuna de la industria azucarera. Hicieron funcionar la fábrica de carretas, entre otras demostraciones de laboriosidad. Cuando los jesuitas son expulsados en 1767, la iglesia estaba construida con paredes de ladrillo y techo de bóveda cubierto de maderas con tejas.
Se sabe también que en el año 1814 estuvo acantonado el Regimiento de Granaderos a Caballo, San Martín, Fray Justo Sta. Maria de Oro, el Gral. Manuel Belgrano y José Maria Paz. También sirvió para cuidar el eterno descanso del Gral. Alejandro Heredia, Coronel Crisóstomo Álvarez y el Gral. Celedonio Gutiérrez, todos asesinados en la cercanía del solar. A fines del S XIX funciono una escuela provincial llamada “La capilla” dirigida por Lastenia Blanco.




La Iglesia

Las Ruinas son vestigios de una Misión de los Sacerdotes de la Campaña de Jesús (jesuitas) que fundaron para albergar a los indios de la región.
El edificio fue reconstruido por los frailes dominicos, quienes eran propietarios de una fracción de la antigua estancia desde 1781. En 1767 se interrumpió esta gran obra expulsada por orden del Rey.
En 1882 disponen una gran intervención, adquiriendo el conjunto la conformación que llega hasta nuestros días. En este edificio funciono una escuela hasta 1935, siendo abandonado posteriormente y convirtiéndose lentamente en ruinas. En 1944 es declarado “Monumento Histórico Nacional”.
A comienzos de los años 70 comienza la reconstrucción del mismo (arreglos en la nave, techo, pisos y el aljibe en el patio). Se recupero de Stgo. del Estero el altar y las imágenes de la Virgen del Rosario, Sagrado Corazón de Jesús y San Jose ,  de la Rioja la campana y una cruz del Pontificio.
Actualmente es visitada por turistas nacionales y extranjeros, delegaciones en viajes de estudio por su rica historia en la formación y crecimiento de la provincia como “Cuna de la Industria Azucarera”.


San José

El San José tiene un real interés estético de un elaborado lenguaje formal (contornos redondeados, superficies pulidas, volúmenes ampulosos).
La madera utilizada para su realización, según los testimonios de lugareños, seria de quebracho, pero debido a estudios realizados y por su apariencia final, no coincide con la dureza y rusticidad de ese tipo de madera, lo que hace suponer que en realidad seria de una madera de uso tradicional y de mayor maleabilidad como lo que es el roble o el nogal.-



Imágenes
San José
San José

Iglesia y Convento de San José de Lules.
Iglesia y Convento

Ruinas del convento
Ruinas del Convento
Iglesia
Iglesia
Iglesia y Convento de San José de Lules.
Ruinas de San José